Fondo Sala Esteva

Los productores y su historia

El 22 de junio de 1900, Joan Esteva i Casal (1874-1957) –decorador que se había formado como pintor en Llotja– y Claudio Hoyos i Ayala (1875-1905) formaron la sociedad comercial Hoyos, Esteva y Cia. dedicada al arte decorativo en todas sus manifestaciones, sobre todo al mobiliario, la decoración y las reproducciones artísticas. En noviembre de aquel mismo año, inauguraron un local destinado a la exposición de sus artículos en la calle Paraíso número 7, en una de las Casas de los Canónigos. Un año más tarde, el 27 de junio de 1901, los dos socios abrieron un nuevo establecimiento en la calle del Cardenal Casañas, 4. El 8 de agosto de 1905, Claudio Hoyos moría de forma repentina, de manera que, en 1906, el establecimiento pasaba a llamarse Casa Figueras, Esteva y Sucesores de Hoyos y continuaba su singladura en la calle de Santa Ana, 6, donde también se organizaban exposiciones de arte. Desde 1912 y hasta principios de 1936, la Casa Esteva se convirtió en un espacio privado con una programación expositiva periódica similar a la de otras galerías.

En 1936 se trasladaron de nuevo, esta vez al 21 de la calle de Caspe, donde inauguraron la galería de arte Sala Esteva con la intención de ir abriéndose a las vanguardias. Cuando el movimiento Amics de l’Art Nou (ADLAN) decidió organizar una exposición dedicada a Picasso en 1936, escogió esta galería, porque resultaba idónea en términos de intereses artísticos, pero también económica y logísticamente. 

Alcance y contenido

Los documentos que forman parte de este fondo tienen orígenes diversos, pero fueron recopilados por la Sala Esteva con motivo de la celebración de la exposición de enero de 1936 dedicada al artista.

De carácter parcial, el fondo consta de 36 fotografías (positivos sobre papel y placas negativas monocromas) que reproducen 22 obras de Picasso expuestas en aquella ocasión y siete fotografías que muestran dos vistas diferentes de la Sala Esteva con las obras colgadas. Las fotografías que reproducen las obras de Picasso provenían, en su mayoría, de la revista Cahiers d’Art. Cuando llegaron al Museu no presentaban un orden predeterminado, pero contenían tres tipos diferentes de numeración que podrían corresponder a sus distintos usos. Muchas copias llevaban, escritas a mano en el reverso, anotaciones sobre el título, la técnica, la fecha y el propietario de las obras reproducidas. Asimismo, la mayoría tenían estampado en el reverso el nombre del fotógrafo.

También forman parte del fondo once discos editados en París en 1935, que contienen los parlamentos que Jaume Sabartés, Juli González, Luis Fernández y Salvador Dalí pronunciaron con motivo de la inauguración de la exposición de Picasso; una tarjeta de invitación a la primera conferencia que Paul Éluard impartió en la misma Sala Esteva; dos números de la revista D’Ací i d’Allà (invierno de 1934 y verano de 1936) y un par de recortes de prensa sobre la recepción crítica de la exposición. En el conjunto documental destaca un retrato de Picasso hecho por el fotógrafo Man Ray en el año 1932 y utilizado como imagen de la exposición; posiblemente lo que hoy consideraríamos una copia de prensa.

Las fotografías se sometieron a un proceso de restauración y conservación preventiva de la mano del especialista Pau Maynés, realizó el estudio, la limpieza, la restauración y el acondicionamiento. Los once discos (tres de pasta sobre placa de metal y ocho de acetato sobre placa de metal), presentaban un estado de conservación bastante delicado: estaban llenos de polvo, con las zonas no grabadas totalmente cuarteadas y que se desprendían muy fácilmente, y las zonas grabadas tan estropeadas por moho y oxidaciones del metal que la lectura por medios mecánicos con aguja era totalmente inviable. La colaboración desinteresada del Museu de la Música –concretamente de su director, Romà Escalas– fue crucial para recuperar las grabaciones y garantizar su estabilización. Escalas coordinó el delicado proceso de restauración y conservación preventiva de los discos, la lectura mecánica de la grabación y de su posterior digitalización. El resto de documentos en soporte papel fueron tratados por el Departamento de Restauración y Conservación Preventiva del Museu Picasso. 

Las fotografías que reproducen las obras de Picasso son especialmente importantes porque revelan qué obras fueron expuestas en la muestra.

Datos de ingreso

El Fondo Sala Esteva ingresó en el Museu mediante dos compras efectuadas entre el 4 de abril de 2009 y el 1 de enero de 2010 a Claudio Hoyos Catasús, nieto de uno de los propietarios de la galería de arte barcelonesa.