Desamparados
Desamparados
Desamparados
El tema de la maternidad está presente en las diferentes etapas de la producción artística de Picasso, aunque más frecuentemente en las primeras épocas. La gama cromática azul de este pastel crea una atmósfera fría y oscura, pero, dentro de ella, la luminosidad de las carnaciones de los rostros da vida a los personajes. Los ojos redondeados observan el entorno en direcciones y actitudes diferentes. La madre protege al niño con el gesto de recogimiento de la mano y con la ropa que le cubre la cabeza; el niño se muestra tranquilo.
Mientras que la expresividad de la obra recae en las miradas de ambos personajes, su carácter simbólico se manifiesta en la mano de la mujer, en la que se aprecia cierta influencia de El Greco. El alargamiento y la desproporción de la mano se repiten en otras obras de la misma época, como "La comida frugal" (MPB 110.011) o "El loco" (MPB 4.272), en las que el artista representa a los segmentos más desfavorecidos de la sociedad. En la época azul, se observa un interés renovado por la contundencia de los cuerpos. Con algunos rasgos próximos al modelado clásico y otros que se alejan de él —como la comentada desproporción de algunas formas—, los volúmenes escultóricos se integran en la pintura.
"Desamparados" sugiere una nueva visión de la realidad social en que vive el artista a principios del siglo xx; un nuevo humanismo, donde la belleza clásica entendida como proporción ideal desaparece, mientras las emociones y los sentimientos devienen la esencia.
47 cm x 40 cm
Compra Plandiura, 1932
MPB 4.269