El Centre Picasso de Gósol inaugura su nueva exposición permanente "Picasso, Gósol 1906"
El Centre Picasso de Gósol inaugura su nueva exposición permanente Picasso, Gósol 1906 con la colaboración del Museu Picasso Barcelona, y también presenta la muestra Bernard Plossu. Paisajes catalanes de Picasso.
El sábado 6 de julio se inauguró Picasso, Gósol 1906 en el Centro Picasso de Gósol. La exposición muestra imágenes de obras que el artista realizó durante su estancia en la localidad pirenaica, que significó un punto de inflexión en su trayectoria artística.

La visita de Picasso a Gósol no solo fue un acontecimiento para la ciudadanía del pueblo, sino que también supuso una revolución en la mentalidad creativa de Picasso, porque fue allí donde empezó a desarrollar las bases de su arte más primitivo e ibérico, ampliamente representativo durante los años posteriores. La exposición gira en torno a la visita de Picasso en primavera de 1906, y se centra en el cuaderno que realizó durante la misma y otros materiales que lo ponen en contexto: fotografías de Gósol a principios de siglo; la importancia de la Virgen de Gósol; las cartas que Picasso le escribió a Casanovas desde allí. Además, presenta la obra literaria de Fernande Olivier y Gertrude Stein, quienes escribieron sobre el paso de Picasso por Gósol y la importancia que este tuvo en en la evolución de su pintura de hacia la modernidad.

En paralelo, el Centre Picasso de Gósol también presenta la nueva exposición temporal Bernard Plossu. Paisajes catalanes de Picasso, un viaje fotográfico a los parajes catalanes más relevantes en la trayectoria de Pablo Picasso y donde destaca, precisamente, Gósol.
Picasso y Catalunya
La renovación del espacio expositivo del Centre Picasso de Gósol es iniciativa del Ayuntamiento de Gósol, que ha contado con la ayuda del Museu Picasso de Barcelona, en el marco de un convenio de colaboración. El acuerdo se inscribe en el proyecto de creación de la futura Red de Museos y Centros Picassianos. El Museu Picasso tiene como objetivo impulsar el conocimiento, la difusión y la comunicación sobre su fondo artístico y documental, así como desarrollar vías de cooperación con otros museos, universidades, instituciones o centros de investigación nacionales o extranjeros, que favorezcan el intercambio de experiencias y de conocimientos sobre Picasso.
Picasso y Gósol
Cuando Pablo Picasso tenía veinticuatro años, quiso abandonar la ciudad y volver a pintar en contacto con la naturaleza. Era 1906, vivía en París y tenía dinero porque había vendido todos los cuadros que tenía en su estudio. Su deseo era ir a Barcelona para ver a sus padres, hermana y amigos, y presentarles a su pareja, Fernande Olivier. Un médico amigo le recomendó un pueblo de las montañas del Pirineo, de camino a Andorra, llamado Gósol. Así empieza Picasso, Gósol 1906, con la llegada de Picasso a la pequeña localidad pirenaica a lomos de un burro. A través de sus cuadernos percibimos la fuerte influencia del paisaje en los cuadros de Picasso, que empiezan a demostrar el cambio de la pintura figurativa a una representación realista, pero más abstracta, de su entorno.


Además de Pablo Picasso, en esta exposición intervienen otros tres personajes históricos muy importantes. En primer lugar, Fernande Olivier, su pareja y modelo, con quien fue a Gósol y la persona de quien se conserva la correspondencia del viaje. Olivier escribió sus memorias, que fueron publicadas en vida, pero una parte de las mismas no vio la luz hasta después de su fallecimiento. En segundo lugar, Gertrude Stein, escritora y coleccionista y modelo del pintor para el retrato que le estaba haciendo. Stein también publicó unas memorias en las que se habla de este viaje. Y finalmente, Guillaume Apollinaire, el poeta, que era el mejor amigo de Picasso y a Oliver y él escribían desde Gósol.