El paseo de Colón
El paseo de Colón
El paseo de Colón
A pesar de sus modestas dimensiones, "El paseo de Colón" condensa un gran número de elementos significativos. Dentro del conjunto de obras del museo realizadas por Picasso en 1917, es la única con referencia al paisaje y constituye, paralelamente, la última presencia importante de la ciudad de Barcelona en la iconografía picassiana.
En ella se yuxtaponen diversos contrastes. La composición tiene una evidente estructura de perspectivas complementarias tomadas desde diferentes puntos, que manifiestan una marcada influencia cubista. La apertura del balcón representa el elemento de diálogo entre el interior y el exterior. Los laterales, enmarcados por las típicas contraventanas de batientes plegables, están elaborados en gamas de blancos y grises: luminoso y preciso el lado izquierdo, tocado por el sol; sombrío y difuminado el derecho. La barandilla de hierro colado es el elemento fundamental en la gran profundidad que alcanza la composición: aparece silueteada y al sesgo en el reflejo del cristal, partida en forma de «V» su sombra negra central, y blanca en su versión más realista, que da paso al paisaje, con el hábil recurso de integrar la bandera que ondea desde el edificio vecino. Los referentes reales se completan con el edificio contiguo, el mar, las palmeras, la silueta de Montjuïc y la columna coronada por la estatua de Colón, uno de los símbolos de la ciudad. El tratamiento de la pincelada —desde el empaste de las volutas de la barandilla y de los trazos cortísimos del cielo, hasta la transparencia de las grandes manchas negras triangulares— confiere gran complejidad al conjunto.
Picasso pintó este cuadro desde la óptica de los balcones del Hotel Ranzini, situado en el número 22 del paseo de Colón, a poca distancia del domicilio familiar del artista. Allí se hospedaban miembros de los Ballets Rusos de Serguéi Diaghilev, que, huyendo del escenario europeo de la Primera Guerra Mundial, presentaban en Barcelona el ballet Parade, del que Picasso era escenógrafo y figurinista. En ese mismo balcón, el artista realizó diversos retratos de Olga Khokhlova, bailarina del ballet que habría de convertirse en su primera esposa.
Ubicada en
CP Sala 0940 cm x 32 cm
Donación Pablo Picasso, 1970
MPB 110.028