Ciencia y Caridad

Ciencia y Caridad

Ciencia y Caridad

A principios de 1897, Picasso emprendió la realización del gran lienzo "Ciencia y Caridad" con el objetivo de reforzar su presencia en los medios artísticos nacionales. Siguiendo las directrices del realismo social, tan en boga a finales del siglo xix, esta obra constituye el colofón del primer período de juventud. El óleo fue presentado en la Exposición General de Bellas Artes celebrada en Madrid ese mismo año y obtuvo una de las ciento veinticinco menciones honoríficas otorgadas.
La elección del motivo fue una apuesta meditada y calculada por parte del padre del artista. Poco amante de los riesgos, José Ruiz atendió a las preferencias de los jurados a la hora de otorgar los premios y optó por un tema que uniera la medicina moderna, personificada en el médico, y el socorro asistencial, simbolizado en la monja. Siguiendo los consejos paternos, Picasso pintó un cuadro que guarda similitudes argumentales y compositivas con las pinturas de temática clínica realizadas por artistas que triunfaban en las exposiciones oficiales. Además de decidir el tema, José Ruiz posó para la figura principal y, con la finalidad de que su hijo pudiera trabajar con tranquilidad, alquiló un estudio en la calle de la Plata, a medio camino del domicilio familiar, en la calle de la Mercè, y la Llotja.
Al realizar este ambicioso lienzo, Picasso se ciñó a los preceptos y a la estricta técnica academicista en busca del realismo en la escena, pero la verosimilitud del ambiente resultó cuestionada por la artificiosidad del decorado y la forzada actitud de los personajes. Una serie de esbozos de pequeñas dimensiones —el museo conserva seis de los nueve conocidos— pone de manifiesto las variaciones compositivas y las dificultades del joven artista, que, al aplicar directamente el óleo sobre la tela sin recurrir al dibujo previo, fue rectificando la ubicación y el gesto de las figuras hasta conseguir el efecto deseado. No obstante, el rostro del médico, realizado alla prima, denota una depurada técnica y captación psicológica, aprendida y perfeccionada en los numerosos retratos que Picasso hiciera de su padre.
Pese a su efectismo, hay en esta obra algunos detalles determinantes que la alejan de la pulcritud de la corriente del realismo social. Los goterones de color marrón que ensucian la pared bajo las contraventanas cerradas resultan más elocuentes al evocar la pobreza que el ficticio decorado. Asimismo, el marco barroco, que sustituye al crucifijo de los primeros esbozos y que también aparece en la obra "El monaguillo" (Museu de Montserrat, Barcelona), entra en contradicción con la austeridad de la estancia.

Ubicada en

CP Sala 03
Ciencia y Caridad
Óleo sobre tela

197.5 cm x 250 cm

Donación Pablo Picasso, 1970

MPB 110.046

Todo proceso de documentación es, por definición, un trabajo en desarrollo. Si tienes información adicional sobre este registro o detectas algún error, envíanos tus comentarios, por favor.
Colecciones
Exposiciones
  • 1897- "Exposición General de Bellas Artes". Palacio de las Artes e Industrias, Madrid (Espanya)
  • 1981- "Picasso 1881-1973. Exposición antológica". Museo Español de Arte Contemporáneo, Madrid (Espanya)
  • 2024- "Arte y transformaciones sociales en España (1885-1910)". Museo Nacional del Prado, Madrid (Espanya)
  • 2018-2019- "Picasso. Chefs-d'oeuvre !". Musée national Picasso-Paris, París (França)
  • 2010-2011- Display "Ciència i Caritat al descobert". Museu Picasso, Barcelona, Barcelona (Espanya)
  • 1982- "Picasso 1881-1973. Exposició antològica". Museu Picasso, Barcelona, Barcelona (Espanya)
  • 1980- "Pablo Picasso: A Retrospective". The Museum of Modern Art (MoMA), Nova York (EUA)
  • Sigue informándote

    Logo de FacebookLogo de TwitterLogo de InstagramLogo de Youtube
    close
    CAPTCHA
    Esta pregunta es para comprobar si usted es un visitante humano y prevenir envíos de spam automatizado.